Cuaderno de Música (1844) de Juan P. Esnaola.
El Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires, conjuntamente con la Universidad Nacional de La Plata, acaban de publicar el Cuaderno de Música (1844) de Juan P. Esnaola. Para ello se aunaron los esfuerzos del Museo de Instrumentos Musicales “Dr. Emilio Azzarini”, dependiente de la Dirección de Cultura de la Secretaría de Extensión Universitaria, y del Archivo Histórico “Dr. Ricardo Levene”, organismo de la Dirección Provincial de Patrimonio Cultural, que agregó esta obra a su lista de publicaciones. Las presentaciones del Cuaderno de Música (1844) de Juan P. Esnaola estuvieron a cargo del Dr. Claudio Panella y de la museóloga Élida Reissig, mientras que el profesor, musicólogo y compositor Bernardo Illari fue el responsable del estudio preliminar. En él se analizan las características del manuscrito, su filiación y cronología, la figura de Juan P. Esnaola y especialmente las danzas que figuran en su cuaderno. Respecto a estas, estudia las influencias estilísticas de los años 30 y 40 en la música argentina y el significado de las piezas que aparecen en el manuscrito, un total de 17 distribuidas en 1 cuadrilla, 11 valses, 3 polkas y 2 minués, entre los que está el famoso “Minué federal”. Juan Pedro Esnaola, nacido en 1808, está considerado la personalidad más importante de la música argentina del siglo XIX. Estudió primero en Buenos Aires, su ciudad natal, y luego en París y Madrid. Volvió a la Argentina en 1822 y se consagró como intérprete de piano. Más tarde se dedicó a la composición.. En el Nº 11 de la revista La Moda, del 27 de enero de 1838, ya se encuentra un Minué de Bellini arreglado por Esnaola, en tiempos en que Miguel Cané y Juan Bautista Alberdi disputaban acerca quién era superior a quién, si Rossini o Bellini. Esnaola fue quizás el músico más brillante de la época de Rosas. Sus numerosas creaciones para piano o para canto y piano, se publicaban en el Boletín musical —también editado por el Archivo Histórico de la Provincia— y en La Moda. En 1860 creó la versión musical del Himno Nacional Argentino que se utiliza en la actualidad. Hasta su muerte en 1878 trabajó asimismo en misas, réquiem, himnos religiosos y sinfonías, además de las canciones y música de baile. Su prestigio no se apagó con su muerte, pues seis años después, en 1884, Lucio Vicente López, con el título de "La música del pasado" escribía en el diario Sud-américa del 20 de agosto: “Esnaola es sin duda el músico del pasado por excelencia. Por más de veinte años su música ha hecho las delicias del salón porteño. Esnaola era un rosiniano genuino. Se me dirá que todos los viejos son rosinianos, y, en efecto, así es. Pero Esnaola lo era con un culto y una asimilación de escuela completos. Nuestros padres y abuelos no recitan a Echeverría sin cantar a Esnaola”. En cuanto a su versión del Himno Nacional, de 1860, fue aceptada oficialmente por el Poder Ejecutivo el 25 de septiembre de 1928.
Prof. Guillermo Pilía / AHPdeBA
