En medio de las imágenes en blanco y negro de Holmberg,
Thays y Ameghino y de las coloridas fotografías que presentan los proyectos del
zoológico, dos representantes de la Asociación de Trabajadores de Museos
entrevistaron a Claudio Bertonatti,
director del Zoológico de la
Ciudad de Buenos Aires.
ATM: ¿Cuándo
asumió como director del Zoológico?
Claudio Bertonatti:
El 16 de enero, hace menos de un año, pero me parece que hace 20; me parece que
supera por mucho las energías que tengo. Son muchas cosas, hay algo coyuntural,
con un gran contenido político, en lo cual me declaro incompetente y no me
interesa aprender. Son muchos frentes, los más fáciles para mí son los que
entiendo, los que me gustan. Normalmente me toca trabajar para que me dejen
trabajar, ese es el problema. Tengo que trabajar embistiendo y neutralizando
para que me dejen trabajar, porque como hay que cambiar muchas cosas y yo ya
las puse por escrito (nos muestra dos publicaciones). La idea es no improvisar.
Para mí es clave tener un plan.
ATM: ¿Cuál es su
profesión? ¿De dónde proviene?
CB:
Soy museólogo, estudié Biología y trabajé treinta años en la Fundación Vida
Silvestre. Cuando me ofrecieron el Zoológico de la ciudad, yo estaba en la Reserva Ecológica.
Antes estaba tranquilo con mi trabajo en
Vida Silvestre, haciendo consultorías cada tanto, sobre distintos temas
y un día me llaman a casa. Estaba tranquilo mirando una película, y me dicen
Claudio, te interesa dirigir el la Reserva Ecológica? No! Yo no tengo ni vocación ni
aptitud para funcionario público; ahora como consultor, o técnico, ad-honorem,
contá conmigo, no hace falta que me nombres nada, llamáme cuando quieras. Imaginate
que con un grupo de amigos planeamos crear la Reserva , así que no voy a
abandonar algo que siento que es como una criatura mía de alguna manera. Y me
insisten: pero Claudio mirá que viene en
caída libre, etc. Bueno, hagamos una cosa -les dije-, por un año nada más;
entonces en ese año trato de poner las cosas en orden, de generar un plan de
trabajo.
ATM: En la
historia del Zoológico, ¿hubo profesionales que dirigieran esta institución?
CB: El zoológico tuvo directores con
perfil comercial, con la idea de manejar el Zoológico como una empresa.
ATM: ¿Desde
cuándo está concesionado el zoológico?
CB:
Desde el 90, lo cual fue un error estratégico para mí, para la percepción
de qué idea de estado quisiera yo tener. Yo soy estatista; pienso que el estado
debe tener las riendas de la Nación
y hay instituciones que no puede delegar, privatizar ni concesionar. Cuáles son
para mí? Parques Nacionales, los museos referenciales de cada disciplina o
tipología, los zoológicos, los jardines botánicos, que están como en el olvido.
Pero entre ese Estado ideal y el que hay hoy, independientemente de los poderes
políticos, hace años que yo no veo un Estado que tome a estas instituciones
como bastiones de desarrollo del país, que tome estas instituciones en las cuales
apoyarse. Es por eso que las ONGs de las cuales yo provengo han tomado un
protagonismo exacerbado. Las ONGs ocuparon el nicho que fueron perdiendo los
institutos de investigación, las universidades. La ONG tiene que apoyar, complementar la tarea del estado, a veces
cuestionando, a veces apoyando, o siendo neutral; cumpliendo objetivos que
trasciendan las gestiones políticas. Pero qué pasa, las ONGs han ido ocupando
nichos a veces premeditadamente, a veces improvisadamente, pero los han
ocupado. Pienso que los referentes tienen que ser los organismos de Estado, que
para eso se crean, y desgraciadamente también a las ONGs les es rentable o les
da raiting, o les es positivo ocupar ese nicho que la misma sociedad las empuja
a veces como si fuera la voz infalible. En este contexto, el zoológico es una
de las instituciones no delegables para mí.
ATM: ¿Por qué
tanta mención en los medios últimamente sobre el tema del cambio de concesión,
si hace como 20 años que esto estaba previsto?
CB: Tiene que ver
con todo lo que dije antes: la falta de planificación, porque hace 20 años que
se había dado la concesión, no es que sorpresivamente se terminaba, ya se
sabía. Lo que pasa es que la triste realidad es que este tipo de instituciones,
como muchos museos, como los de Ciencias Naturales no tienen carácter
prioritario; entonces si se vence o es está por vencer, no está en la agenda…. Si
digo que son importantes, lo tengo que tener en mi agenda y no se me puede
pasar por alto que se me va a vencer una concesión; es más yo estaría pendiente
de ver cuándo se vence para decir bueno a mí me gustaría que el Zoo estuviera
bajo mi órbita.
En ese contexto de que se vencía la concesión, se venció, quedó en el aire el
zoológico y, uno se pregunta, si el concesionario entrega las llaves, a quién? -porque
lamentablemente no hay nadie. No existe un organismo de la órbita estatal capaz
de llevar adelante un zoológico de una complejidad notable. Acá hay 700
personas, 2400 animales, hay patrimonio arquitectónico, obras de arte, es
monumento histórico nacional, tiene 52 edificios, 3 millones de visitantes
anuales, de estos últimos, más de 2 millones no pagan entrada porque son
menores de 12 años, discapacitados, jubilados o porque son estudiantes
universitarios. Esto que es una oportunidad, una virtud de esta institución:
que cualquier persona de cualquier clase social pueda venir, hace también que
tenga una complejidad enorme porque como la entrada de los chicos es gratis,
viene un adulto con 5 chicos cada uno, entonces hay un tema de seguridad,
porque una persona con 5 chicos no tiene el control de los chicos en un
zoológico que es como un parque de diversiones para ellos, que se desbandan;
entonces los fines de semana el lugar de los niños perdidos es un festival
aparte. Son temas de seguridad, imaginate que un chico cometa una imprudencia y
se tire a un recinto con animales peligrosos, lo cual te obliga a tener
condiciones que cuando yo hago un repaso de instituciones parecidas manejadas
por el Estado, y analizo esto, me produce pánico; más después de mi experiencia
en la Reserva ,
de muchísima menor complejidad.
Tuve charlas con algunos legisladores que piensan como yo:
que en condiciones ideales el zoológico debería estar en manos del Estado; éste
zoológico, porque es el Zoológico Nacional de alguna manera. Y yo les decía: vengo
de la Reserva Ecológica ,
durante un año y dos meses tuve $10.000 de caja, ése fue mi presupuesto. Aquí
tengo muertos a la semana, a todos los animales, porque ellos no entienden de
expedientes, que se cajonearon, que hay que llamar al amigo político para que
te lo destrabe, etc.: el elefante necesita 15 fardos por día, 700 kg de carne para los
felinos.
ATM: ¿Esta
institución admite o tiene Asociación de Amigos?
CB: Tuvo, y de
hecho yo me reuní con la última sobreviviente: la señora tiene 94 años. Y, es
este tema de los unipersonales, que hay alguien que la remonta, que tiene
carisma, las ganas, todo, reúne los amigos, vamos para adelante, y en al medida
en que esa persona entra a tener problemas trastabilla todo. Y esta Asociación
tuvo vida hasta hace 25 años digamos, y la señora que la dirigía y que contacté
se llama Silvia Monsalve. Era como una asociación cooperadora. Yo creo que hoy
el zoológico necesita algo más que eso, yo vengo hablando de tener una suerte
de fundación del Zoológico de Buenos Aires que permita incorporar los valores
de una fundación, de una ONG, una entidad de bien público dedicada al
zoológico. Y tener un modelo mixto de gerenciamiento.
ATM: ¿Tiene un
plan de trabajo?
CB: Miren, mi
agenda es pública (Claudio nos muestra una placa de acrílico colgada en su
despacho con sus anotaciones). Ahí están escritos mis asuntos pendientes, está
cada una de las direcciones, entonces de cada dirección los temas que tengo que
emprolijar, las zonas que para mí son prioritarias. Éste es el tipo anual o la
entrada de visitantes por área (muestra un gráfico), el grueso viene en las
vacaciones de invierno, entonces qué cosas puedo hacer? Porque quiero traer más gente, pero no
solamente por la entrada, porque si el objetivo del zoológico es dejar un
mensaje al visitante es que sea un mejor ciudadano.
ATM: En asuntos
pendientes se ve el tema del presupuesto,
¿cuál es el que manejan?
CB: Te desdoblo
la respuesta. Por un lado hay un perfil de presupuesto que es cuánto hay que
gastar, qué proporción, que es lo que el pliego obliga.
El zoológico es de la ciudad, los edificios son de la
ciudad, los animales son de la ciudad. Entonces imaginate que en ese
vencimiento de la concesión había que hacer algo rápido. Qué pensaron? Hagamos
una subasta dijeron… hasta el nombre suena feo.
ATM: Los medios
señalaron que la subasta era al mejor postor en vez de la mejor propuesta.
CB: Lo real es
que hay verdad con mentira mezclada. Yo escuché a todos y, a los que se
embanderan detrás del zoológico les hacés dos preguntas y se van a marzo.
ATM: ¿Qué sucedió
el lunes pasado?
CB: Vinieron tres
legisladores. Pero si a los tres les pregunto: decime cuáles son las cosas para
mejorar, no tenés necesidad de mentir ni inventar y si mentís o inventás es
porque tenés malas intenciones o porque no tenés ni idea de lo que estás
hablando. Si me dijeran: mirá Claudio, acá hay edificios que se caen a pedazos,
tienen razón y hay que trabajar para que no se caigan, hay que restaurarlos; me
dicen que hay animales que no están bien, que no están en buenas condiciones,
tienen razón, si yo estoy de acuerdo y si yo
tampoco quiero que estén así; no me tenés que inventar nada y hasta nos
pegan en las cosas buenas; los legisladores nos dicen que es mentira que exista
un proyecto vinculado a la conservación de las águilas coronadas por ejemplo;
vos me podés decir que no tenemos un proyecto de conservación de águila arpía
pero sí de águila coronada, no hace menos de un mes largamos dos. Lo que se ve
es que no tienen conocimiento, si tuvieran conocimiento estarían acá más
seguido. Entonces qué hizo el Gobierno de la Ciudad? Ideó este sistema de
subasta que se aplica a otras cosas pero no a un zoológico y para mí es
incorrecto. Ahora con qué se trató de salvar el honor con esto de la subasta, porque
la subasta es válida cuando vos ofrecés en concesión un servicio o un bien que
no puede tener mucha disparidad de manejo ante distintos oferentes. Una playa
de estacionamiento, un sistema de parquímetros, diez tipos no pueden ofrecer un
sistema muy distinto, ahora con un zoológico sí y con un agravante, si vos no
ponés por escrito, que es lo que estás pretendiendo lograr sí estamos en
problemas. Ahora qué fue el instrumento para evitar mucho de esto, el pliego,
porque qué se ponderaba? Quién está dispuesto a pagar el cánon más alto. Si
hubiera tres oferentes lo hubieran hecho seguro, ver dónde podemos achicar para
tener más para ofrecer de cánon si es eso lo que están ponderando para la
victoria y perfectamente vos podés ofrecer el mejor cánon con el peor
zoológico. Los pliegos son una base sobre la cual se entiende que todos los que
van a participar van a cumplir esto que es el piso aceptable para justificar el
cánon. Cuando nosotros vimos el pliego notamos que hay un 85 % de la inversión
que tiene que ver con obas de infraestructura, de restauración del patrimonio
arquitectónico, de mejoramiento de los caminos y un 15 % para lo que yo digo la
razón de ser del zoológico.
ATM: ¿Los
animales?
CB: NO, ni
siquiera aparece en el pliego, en ningún momento aparece un porcentaje
destinado al mejoramiento del bienestar animal. Dice, el 15 % dixit
mejoramiento de la oferta educativa y científica. En ese contexto se pedía una
propuesta técnica, yo digo es nuestra oportunidad para hacer un plan que es
éste (nos muestra dos publicaciones), un plan a cinco años donde pongamos lo
que nos pide el pliego más lo que no te pide el pliego que hay que hacer, ahí
está la clave, porque si yo hago sólo lo que me pide el pliego yo digo esto no
es para mí, que venga un arquitecto u otro museólogo que sepa de restauración
que no es mi caso para nada y que se ponga a trabajar como si esto fuera la
comisión de patrimonio arquitectónico y hay algo más, hay que configurar otro
equipo de trabajo. Entonces en el plan qué hicimos. Volcamos un capítulo a algo
que no está ahí, esto es qué hay que hacer en materia de bienestar animal y en
esto hay muchas cosas: nutrición, enriquecimiento ambiental, entrenamiento, el
trabajo de los cuidadores; el cambio de cuidador de hoy con el de mañana; el
cuidador de mañana tiene que ser un gestor del bienestar animal, no es la persona
que limpia la caca de los animales y les da de comer, es una cosa mucho más
compleja con otra mentalidad frente al animal; por suerte en el zoológico hay
gente así pero no estaba encuadrado dentro de un plan, estaba librado a la
iniciativa personal, a la vocación, al amor por los animales, pero tiene que
estar encuadrado en este modelo, no hay lugar para el otro modelo, el otro
modelo es limpieza que está en otra área. Entonces a la inversión que se pide
ahí hay que hacer otra.
Y después hay un tema de fondo, vinculado a la charla
inicial que es así como el zoológico yo no lo delegaría, el zoológico nacional,
es como los zoológicos provinciales, yo si fuera la provincia x y tengo un
zoológico en la capital ese zoológico no lo queremos porque para mí es un lugar
clave, estratégico para hacer muchas cosas, entre otras, generar mejores
ciudadanos, ambientalmente más responsables, con más conciencia ambiental. El
zoológico tiene algo que no tiene otra institución, un poder de convocatoria;
yo las desafío a que me digan qué otra institución existe que junte 3 millones
de personas por año; el Parque Nacional Iguazú, patrimonio de la humanidad, una
de las siete maravillas del mundo tiene la mitad de la que tiene el zoológico.
Ahora si ese poder de convocatoria no va acompañado de un mensaje responsable
es una irresponsabilidad. Nosotros tenemos que justificar el cautiverio. Por
qué están acá, por qué no están en otro lado. Vos me podés decir Claudio,
nacieron todos en cautiverio, vinieron de otro zoológico, ya no hay más
animales capturados en la naturaleza.
ATM: ¿El
zoológico adhiere a lineamientos internacionales de conservación?
CB: Sí a nivel
mundial así como está el ICOM para los museos, existen instituciones referentes
de zoológicos del mundo; con estas instituciones existe una estrategia de
conservación donde está claro lo que hay que hacer; la última vez se juntaron
en el 2005, entonces ya no es opinable lo que tiene que hacer cada zoológico;
esto es así. Este texto sobre estrategia de conservación está on line. Es muy
bueno, te leo uno de los últimos párrafos que dice: Los zoológicos modernos deben replantearse su funcionamiento, la forma
en que se han conducido hasta ahora porque si no lo hacen están condenados. Esta
es una verdad espectacular, estoy convencidísimo, porque cuando se crearon
muchos zoológicos como éste, la misión del zoológico era a un país recién
nacido, mostrarle a sus habitantes cuál era su patrimonio natural, era mostrar
qué había, de qué se trataba, misión cumplida, ya está. Hoy no nos podemos seguir dedicándonos a mostrar animales, es un
delirio, es una enorme irresponsabilidad, hoy lo que tenemos que hacer es:
aquel que no lo conoce mostrárselo pero ya todos saben lo que es un tigre,
entonces lo que tenemos que decirles hoy ves lo que estás viendo? La gran
mayoría de lo que vos ves están en peligro y sabés por qué están en peligro,
porque algo tenemos que ver nosotros como especie, qué podés hacer vos, muchas cosas, desde separar la basura, ahorrar
energía, ahorrar agua, ser más cuidadosos con los bienes que compramos, ser
mejor ciudadano dicho de otra manera; evitar comprar animales que están en
peligro; mucho de lo que ven acá es decomisado; mirá lo último lo tengo acá, en
estas cuatro cajas (nos muestra unas pequeñas cajas de madera con mallas metálicas)
había 157 pájaros, claro al menos de una semana la mitad ya estaban muertos y
había muertos ya de entrada. ¿Por qué existe esto? Porque hay gente que los
compra.
Entonces el objetivo es que el zoológico funcione, como un
lugar, de hecho lo estamos haciendo por suerte, que pueda complementarse con
otras instituciones para conservar no lo que está acá adentro, sino lo que está
afuera, entonces si nosotros podemos articular con la Dirección de Fauna, con
Gendarmería Nacional, con los organismos del estado que están trabajando en el
control y nos dicen che decomisamos esto, traémelo que hacemos todo lo posible
por salvarlo y después si el juez dictamina que podemos liberarlo, liberémoslo.
ATM: ¿Cómo es la
relación con Parques Nacionales?
CB: Buena en
general. Yo tengo un cariño por Parques enorme, más allá del funcionario de
turno.
ATM: El problema
son las comunidades indígenas no?
CB: Claro ese es
un tema pésimamente manejado a mi criterio porque yo creo que ninguna persona
que viene del lado de la conservación puede estar en contra de los derechos de
los pueblos originarios. Ahora desafectar el parque para entregarlo…
ATM: No, pero el
uso del espacio, por ejemplo de la laguna en el Parque Nacional Río Pilcomayo
por la comunidad qom que ancestralmente hicieron uso de esos terrenos y
actualmente lo tienen prohibido, bueno eso ocurre en Formosa.
CB: Por eso hay
cosas mal manejadas, porque en Lanín también es un desastre, la congestión
famosa; si vos mirás hay una mezcla de idealización de los pueblos originarios;
para mí es una nueva forma de neorracismo, somos todos personas y cuando vos
ponés la lupa, encontrás las mismas virtudes y defectos que en cualquier
comunidad humana; pero sí hay un rasgo que es sobrenatural que es el
conocimiento y la relación con el entorno.
ATM: En el sur
Parques Nacionales también entró en contradicción con los pueblos originarios
en tanto que estos pueblos saben más sobre la conservación o el mantenimiento
de los recursos.
CB: Es un tema de
política, si yo soy presidente de Parques Nacionales puedo trabajar puertas adentro o puertas
afuera y dependiendo del funcionario de turno cambia la política. Es como el
zoológico, si yo pienso que tengo que pensar puertas adentro soy un estúpido y
pienso que Parques tiene que trabajar tanto hacia adentro como afuera, y
trabajando con las comunidades vecinas, para que entiendan para qué sirve y que
sientan que el parque es de todos y que está para que la sociedad sea mejor y
que cuando vos tenés conflictos hay que resolverlos, y de la forma más sabia y
justa posible. En esa búsqueda de lo sabio y lo justo yo tengo la agenda
abierta, no me considero fundamentalista y si tenés que hacer control
poblacional tenés que hacerlo aunque no me guste; pero si es la solución que me
plantean los técnicos que esa es la salida y hay que tomar la decisión. En África,
los grandes parque nacionales que tienen grandes manadas de elefantes como hay
pocos criadores tienen que bajar las manadas, cómo lo hacen, a tiros y vos
decís está bien? Está bien controlar la población, a tiros me parece una
barbaridad, habría que diseñar un sistema de anticonceptivos, algo que existe,
que es factible para lograrlo. La verdad es que si no lo hacés esa población
creciente te destruye los parques, van a ir después por los cultivos de las
comunidades vecinas y vas a declarar la guerra al elefante.
A mí me causa cierta extrañeza la idealización de la
naturaleza; si vos mirás una semana y sabés que es una lucha de supervivencia
despiadada, donde el animal viejito no tiene chance; el animal que se enfermó
está en una situación de vulnerabilidad que no sé si zafa; entonces lo que vos
creíste como idílico, como armonía, no es así y el mundo es mucho peor que eso
todavía; vivimos en un mundo que es cruel, donde vos ves que los modelos
emergentes no es ninguno de los que yo tengo en los cuadritos; de los dos
Maradona que yo conozco la gente vota por el que mete los goles con la mano. Es
un mundo que pondera cosas que son difíciles de digerir para el que piensa no
en la conveniencia personal porque más allá de que me guste o no, el fútbol es
un deporte, pero el deporte debería ponderar el juego limpio; en ese contexto
hacer un gol con la mano es antirreglamentario, no es ético y tiene que tener
una condena; lejos de eso la gente lo celebra y es la mano de Dios, es lo que
piensa muchísima gente.
ATM: ¿Realizó un
diagnóstico de la situación cuando entró al Zoológico?
CB: Claro que sí
y pronóstico reservado te diría porque hay muchas cosas que no están bien. Casi
todas son consecuencias culturales, elementales. Vos decís cuál es el principal
desafío que yo tengo, es cultural. EL primer paso en el diagnóstico del
paciente es reconocer dónde está parado. Si vos negás dónde estás parado vamos
a dar con un tratamiento muy difícil. Y
hay como una resistencia a veces a la autoevaluación, a ponerse una mano
en el corazón y decirse che qué estamos haciendo bien y qué estamos haciendo
mal y lo que estamos haciendo mal podemos hacerlo mejor?, bueno encarésmolo,
hay resistencia al cambio. Yo lo que percibo es que hay gente muy buena y muy
valiosa que viene haciendo las cosas bien y lo mejor que le salen, son los que
están salvando el zoológico; ahora bien, hay otra gente que tiene que provocar
un gran cambio cultural primero para generar el cambio conductual después, voy
a dar algunos ejemplos. Yo cambié el nombre de las direcciones, por ejemplo de
semántica, muy importante para mí; así no había direcciones sino gerencias y
estaba internalizado como algo normal. Para mí gerencia tiene una connotación
comercial, hablemos de direcciones entonces, y los nombres de las direcciones
tienen que ser explícitos; por ejemplo hay una dirección que se llamaba
gerencia técnica, en qué decía yo? En computación? No, entonces decime de qué
se trata y ponemos el nombre de lo que refleja que hace; así hicimos con todas
las áreas. Uno de los cambios, había una dirección que ahora se llama de
infraestructura y operaciones que tiene un área clave que se llama
mantenimiento; en realidad no hace mantenimiento sino reparaciones, porque el
mantenimiento es cuando se tiene una operativa con un personal que tiene
conciencia de la forma de uso que tienen que llevar los bienes, las
herramientas y entonces las cosas ahí no se rompen, hay que mantenerlas, cuando
se rompen hay que repararlas; entonces acá hay poco cuidado, siempre digo que
hay poca conciencia de que esto es un lugar público; yo recorro el zoo y junto
papelito que veo, tengo una colección de botellas y ahí la gente se siente en
infracción, mejor que no me vean que lo levante.
ATM: ¿Qué
profesionales hay en el ZOO?
CB: Hay de todo.
El Zoológico tiene biólogos, veterinarios, paisajistas, arquitectos,
restauradores, diseñadores gráficos, docentes y gente de oficios como
carpinteros, electricistas.
ATM: ¿Cómo son
contratados los cuidadores? ¿Cómo
seleccionan a los profesionales?
CB: Hay de todo.
Hay una Dirección muy importante acá que se llama de Bienestar Animal que
nuclea nutrición, cuidadores, biología, enriquecimiento ambiental y
veterinaria. Esta es un área clave y la que me genera mayor preocupación por la
complejidad y por los cambios que hay que generar en alguna de estas áreas. En
el área de veterinaria estoy contentísimo, tenemos un equipo de veterinarios
muy bueno. Hay que seleccionar en base al perfil, y así se llamó a cubrir esos
puestos. Los dos nuevos que entraron yo no los conocía, entraron después que
yo, no son mis amigos y no es que me falten amigos veterinarios, pero si
hiciera esto se desvirtuaría el zoológico. Y estoy muy contento con el equipo
de veterinarios, de hecho todas las semanas hay una suerte de ateneo entre
ellos donde ponen todos los casos sobre la mesa y el director que es un docente
de la Universidad
de Buenos Aires dice qué hacemos con este paciente, entonces se realiza un
debate y después se lleva adelante. Más allá de eso, tenemos un plan sanitario
que apuesta a la medicina preventiva.
ATM: ¿El
Zoológico es monumento histórico nacional?
CB: Sí y aparte
están sus edificios históricos y hay esculturas muy importantes como la de Lola
Mora. Ahora, si vos lo declarás monumento histórico nacional es porque
considerás que tiene una singularidad que debe ser preservado como un rasgo del
país; pero si es tan valioso yo no se lo daría a un privado y si se lo doy, se
lo doy a medias, hagámoslo juntos, porque no delegaría en un privado que tiene
un perfil comercial; vos fíjate un dato de la realidad: de quién depende el
zoológico dentro de la ciudad, vos podés decir, de Ministerio de Ambiente y
Espacio Público, o de Educación, pero no, depende del Ministerio de Desarrollo
Económico.
ATM: ¿Hay
voluntariado en el Zoo?
CB: Hay pero es
complejo el tema, porque imagínate que desde el momento que entrás al zoológico
hay riesgos, no es imposible que se escape un animal.
ATM: En esta
publicación o documento que vos hiciste se llama Un Zoo Sin Rejas, ¿por qué ese título?
CB: Lo del título
tiene algo de provocador porque en muchas de las críticas que yo escucho del
zoológico hay muchas críticas desde lo emotivo, el de la angustia de ver una
animal tras la reja, y eso tiene una connotación que para quien no está en el
campo de la zoología es difícil incorporarla, que es la humanización de los
animales. Los demás animales, tiene n formas muy distintas de enfrentar la
vida. A los animales les interesa tener un territorio, seguridad, comida,
bebida y condiciones de bienestar. Para un tigre si tiene reja, vidrio o
ladrillo es lo mismo, pero no es lo mismo para el visitante porque la reja es
sinónimo de cautiverio, de prisión, de castigo, y para los monos, si vos decís
que prefiere una malla tejida o un vidrio? Prefiere la malla tejida porque lo
usa como soporte para agarrarse para trepar.
ATM: Contanos
sobre las visitas educativas.
CB: El fuerte de
público es a la mañana, hoy a la mañana había cerca de 50 colegios. La idea es
que no vengan para zafar de la clase ni para sacarse fotos con los animales,
sino que vengan a una clase al aire libre, que sea divertida, que vengan a ver
a los animales que quieren ver pero que además se lleven un mensaje y que
entiendan que mucho de lo que vemos si no nos comprometemos va a desaparecer
definitivamente; acá estamos viendo algunos últimos exponentes como el leopardo
de las nieves.
ATM: ¿Cómo es el
servicio de los guías?
CB: Hay un área
de educación ambiental donde se da entrenamiento a los guías para que sean
provocadores, y más allá de la información que la gente busca, puedan mechar
inquietudes.
ATM: Y La Comisión Nacional
de Sitios y Monumentos Históricos, ¿ustedes tienen relación con ellos? ¿Intervino
de alguna manera a la hora de la subasta?
CB: No se le dio
participación. Entiendo que la
Comisión manifestó su interés por participar pero no se le dio
el lugar; de hecho acá hubo edificios que se han restaurado como por ejemplo el
templo de Vesta, el templo de los elefantes que fue una obra de tres años donde
lo primero que yo pienso la obra debería estar liberada como monumento
histórico nacional por la
Comisión Nacional en conjunción con la dirección de
patrimonio de la ciudad y el zoológico obviamente, pero no pasó esto por
distintas razones, una de ellas es porque la Comisión desgraciadamente
no tiene presupuesto propio; pero no puede ser una comisión tiene que ser un
organismo de gobierno con capacidad de gestión, presupuesto propio y que el
estado le delegue la capacidad de tener los equipos para llevar adelante este
tipo de tareas.
Recorrido por la
clínica veterinaria
CB: Este es el
laboratorio de Crioconservación donde se extraen muestras de tejido, de
órganos, de semen, de ovarios, de óvulos, el , ¿qué queremos lograr con esto?
Especies que estén riesgo o amenazadas
de extinción poder reproducirlas a otra escala, no que haya una pareja
nada más, y hacer inseminación artificial.
Acá hay una sala de cirugía, pasando la incubadora para los
pichones de cóndor, hay equipo de rayos. Y la cuarentena donde están los
rescatados, como una comadreja que trajo una señora, la mona famosa que
apareció en los bosques de Palermo y un pichón Emú, como un avestruz de
Australia, de los huevos que vimos como parte de la reproducción en
laboratorio, un guacamayo con collar isabelino.
Recorrido por el
parque
CB: Acá plantamos
vegetación autóctona que no es tan linda desde el punto de vista estético pero
funciona como un área donde hay abejorros, abejas, los cuales atraen fauna que
las plantas exóticas no atraen y eso
permite que haya más aves dentro del parque.
Mientras cae el atardecer
en el parque Claudio continúa expresando todo su conocimiento sobre los
animales con una verdadera pasión, y finaliza comentando cuáles son los
desafíos del Zoo hoy:
1-
El bienestar de los animales
2-
Las condiciones de seguridad para el cuidador
3-
La preservación del espacio del monumento
histórico nacional
Para más información sobre el
Zoológico de Buenos Aires: http://www.zoobuenosaires.com.ar/