Hasta el 27 de Abril de 2014
se puede visitar en El Palacio Nacional de México la exhibición "Mayas,
revelación de un tiempo sin fin".
Mas de 500 piezas
emblemáticas de varios períodos de esta cultura son desplegadas en las
salas intentando crear un nexo entre los
testimonios arqueológicos y los mayas de la actualidad que ascienden a mas de 7
millones en los diferentes países que habitan hoy: México, Guatemala, Honduras,
Belice y El Salvador.
El patrimonio exhibido
proviene de diversas instituciones que han colaborado para realizar esta
gigantesca muestra. Museos de varios estados mejicanos agrupados bajo el INAH
(El Instituto Nacional de Antropología e Historia), El Museo Nacional de
Antopología por supuesto y varios museos y museos de sitio de Guatemala y
México.
El visitante transitará las
salas divididas en ejes temáticos convencionales como "El hombre frente a
la naturaleza", "La vida frente a los astros", "Comunidad y
vida cotidiana", "La organización de las ciudades",
"Costumbres funearias". "Las élites gobernantes", etc,
hilando el relato a través de objetos rituales, cerámica, grandes piedras,
joyería, máscaras mortuorias, indumentaria e instrumentos.
Gran cantidad de recursos
tecnológicos y didácticos se despliegan en toda la exhibición como instrumentos
para comprender el funcionamiento de las deslumbrantes construcciones y
ciudades religiosas como Tikal, Palenque, Toniná y Chichen Itzá. Mappings sobre
detalladas maquetas, pantallas táctiles y juegos interactivos revelan al
visitante algunas claves para comprender y decodificar los glifos de la
escritura maya, el significado del juego de pelota y las expansiones
territoriales según las épocas.
Tanto en el texto introductorio
como en el texto de cierre la exhibición propone reflexionar sobre los mayas
del pasado y los del presente, pero el discurso que se ve claro en un principio
se pierde a lo largo de las salas en donde predominan las explicaciones de los
significados de las piezas, los materiales y la organizacion de esas
sociedades, pero no podemos ver cuales de estas costumbres, elementos y
comportamientos específicos sobrevivieron en el presente ni que nuevas formas
han tomado.
A opinión de quien escribe
esta nota, la museografía, iluminación y materiales elegidos complementan y
resaltan las magníficas piezas expuestas, sin duda, representaciones de los
mejores valores estilísticos de la cultura maya, pero queda este vacío sobre
los actores comunes de esa sociedad. No de la nobleza, ni de los gobernadores,
ni de los sacerdotes, si no de aquellos que construían, que cultivaban,
comercializaban y organizaban sus familias y de sus descendientes en el
presente.
La exhibición de todas
formas, es magnífica para deleitarse con importantes piezas y observar a los
grandes maestros de la cerámica, de la talla en piedra, de la confección de
joyas, del manejo del oro y el jade, de las observaciones astronómicas y la
organización de territorios.
Gracias a un convenio entre
Francia y México "Mayas, revelación de un
tiempo sin fin", será montada, aunque en formato reducido con unas 350
piezas, en el Museo Quai Branly de París desde el mes de septiembre de 2014.
Lucila Pesoa para
Trabajadores de Museos.